Obtén tu guía gratuita sobre cómo actuar ante un problema penal. Haz clic en el botón de abajo y descarga tu guía.
¿Qué es la legítima defensa y cuándo puedes aplicarla en Ecuador?
Descubre qué es la legítima defensa en Ecuador, sus requisitos de ley y cómo aplicarla con asesoría para proteger tus derechos sin incurrir en algún delito.
Abg. Mateo Salguero
11/18/20243 min read
¿Qué es la legítima defensa y cuándo puedes aplicarla en Ecuador?
¿Sabías que la legítima defensa no es lo mismo que la justicia por mano propia? Esta figura legal, reconocida universalmente, permite a los ciudadanos proteger sus derechos en situaciones excepcionales. En este blog exploraremos qué es la legítima defensa, sus requisitos legales en Ecuador y cuándo puedes aplicarla sin incurrir en un delito.
¿Qué es la legítima defensa?
La legítima defensa es una excepción legal que justifica el uso de la fuerza para proteger derechos fundamentales como la vida, la libertad o la propiedad frente a una agresión ilegítima. Si se cumplen ciertos requisitos, el acto de defensa no será considerado un delito, lo que implica que quien actúe en legítima defensa no será penalmente responsable.
Aunque el Estado tiene el monopolio de la fuerza a través de organismos como la policía, existen situaciones en las que este no puede responder de manera inmediata. Por ello, el Derecho contempla esta causa de justificación como una herramienta de autoprotección legítima.
Requisitos para que haya legítima defensa
Para que una acción se considere legítima defensa, deben cumplirse estos tres elementos básicos:
1. Agresión actual o inminente e ilegítima
La agresión debe:
Ser ilegítima: Contraria al Derecho, como un robo o un ataque físico.
Ser actual o inminente: Estar ocurriendo en ese momento o estar a punto de suceder de manera probable.
Ejemplo: Si alguien irrumpe en tu hogar rompiendo una ventana, estás facultado para defenderte porque la agresión es ilegítima y actual. Por otro lado, no puedes defenderte de acciones legítimas, como un allanamiento policial autorizado.
2. Necesidad racional del medio empleado
El medio que uses para defenderte debe ser:
Razonable: Debe ajustarse a la situación y ser el menos lesivo posible, considerando las circunstancias.
Necesario: La necesidad de defenderse porque no puedes recibir ayuda de un policía y tiene que ver con usar el único recurso disponible para evitar el daño.
Ejemplo: Si alguien te ataca con un cuchillo, podrías usar un arma de fuego si es el único medio que tienes a tu alcance para protegerte.
3. Ausencia de provocación suficiente
Quien actúe en legítima defensa no debe haber iniciado la agresión. Esto incluye tanto provocaciones físicas como verbales significativas. Si fuiste el agresor inicial, no podrás justificar tu conducta como legítima defensa.
Ejemplo: Una persona provoca verbalmente a otra en un bar, burlándose de su apariencia con comentarios ofensivos. Si esta provocación lleva a que la otra persona lo ataque físicamente y luego la primera responde con violencia, no podrá alegar legítima defensa porque fue quien inició la agresión verbal que derivó en la pelea.
¿Qué pasa si hay exceso en la legítima defensa?
Si la defensa excede lo necesario, pierde su carácter legítimo y podría ser considerada un delito. Hay dos casos comunes de exceso:
1. Uso irracional del medio
Se da cuando quien se defiende utiliza un medio excesivamente lesivo frente a la naturaleza de la amenaza o las circunstancias concretas.
Ejemplo: Imagina que una persona te lanza una bofetada durante una discusión en la calle. Aunque se trata de una agresión ilegítima, responder con un disparo usando un arma de fuego sería un exceso, ya que la amenaza no ponía en peligro tu vida ni justificaba el uso de un medio tan letal. En este caso, el medio empleado no sería razonable ni necesario para repeler la agresión.
2. Seguir usando fuerza cuando la agresión ha cesado
Ocurre cuando, tras repeler la agresión inicial, quien se defiende sigue atacando innecesariamente al agresor.
Ejemplo: Un ladrón intenta asaltar a un hombre con un cuchillo, pero este logra desarmarlo y reducirlo al suelo. En este punto, la amenaza se ha detenido. Sin embargo, si la víctima decide seguir golpeando al ladrón cuando ya no representa peligro, estaría incurriendo en exceso de legítima defensa.
Reflexión final
La legítima defensa es excepcional y debe ser probada en un proceso penal por quien la alega. Esto significa que, aunque actúes correctamente, podrías enfrentar una investigación que pone en juego tus derechos. Por ello, si te encuentras en una situación límite, actúa con cautela y busca asesoría legal lo antes posible.
¿Tienes dudas sobre tus derechos en casos de legítima defensa en Ecuador? En nuestra firma de abogados en línea, especializada en derecho penal, te ayudamos a resolver tus inquietudes de forma rápida y eficiente desde cualquier lugar. Nunca olvides guardar silencio y que eres inocente hasta que se declare lo contrario. ¡Contáctanos hoy!